Acabo de leer una noticia bastante vacua con ese mismo titular en el periódico Expansión. La verdad es que yo también me hago la misma pregunta. Pero… ¿cómo podría hacernos comunistas el Coronavirus?
¿Acaso pasarían a ser los héroes y las heroínas de la sociedad doctoras, enfermeros, cajeros de supermercado y reponedoras en lugar de futbolistas y personajes de la farándula televisiva?¿Estarían los aplausos dedicados a quienes sostienen el país en los balcones a las 20:00 y no en platós de televisión con un luminoso que indica cuando hacerlo a cambio de diez euros?
¿De algún modo nos organizaríamos más en comunidad? ¿Ayudaríamos a hacer la compra a las personas mayores, cuidaríamos de los niños sin importar si fueran nuestros y practicaríamos juegos colectivos? ¿Nos preocuparíamos si nuestros vecinos están bien y si necesitan algo de nosotros?
¿Es que compartiríamos la cultura? ¿Habría conciertos basados en la lógica de entretener y no de los beneficios de SONY o WARNER? ¿Se distribuirían libros, música, películas… con el único afán de entretener y compartir?
¿Por arte de birlibirloque la producción dejaría de estar basada en cuadrar las cuentas de grandes corporaciones para cuadrar las cuentas de las necesidades humanas? ¿De algún modo se organizaría en base a lo que el ser humano necesita? ¿Sería socializada atendiendo a este principio como las zapateras de Petrer y Elda que fabrican mascarillas o los makers asturianos que imprimen en 3D respiradores automáticos?
¿Sería posible que se compartiesen los avances científicos para producir en masa combatiendo un mal absoluto? ¿Vacunas, tratamientos para frenar el contagio, diseños de EPIS…?
El Coronavirus ha sido un desastre total, entre otras cosas por la falta de políticas públicas y la prevalencia del interés empresarial a la salud colectiva. Hemos tenido que despertar como sociedad para poner las piedras que edifiquen su erradicación.
En nuestra mano está no volver a dormirnos y que ni este, ni ningún otro virus del tipo que sea nos haga volver a la caverna. Que nos sirva de aprendizaje, de antígeno social.