En el mes de abril, compañeras de todos los confines de México, obreras, amas de casa, desempleadas, madres, estudiantes, se reunieron para dar a luz la Organización de Mujeres Trabajadoras de México (OMTM). Ante el endurecimiento de la barbarie capitalista las compañeras mexicanas se han dotado de una herramienta organizativa de masas y de un programa de lucha para la defensa de sus derechos. La violencia y la explotación sacuden y golpean a las mujeres de México igual que a lo largo y ancho del mundo capitalista. Precariedad, salarios de miseria, falta de seguridad social, despidos por embarazo, acoso laboral y violencia machista son el destino que aguarda a las trabajadoras bajo la dictadura del capital y los gobiernos burgueses que lo representan.
La OMTM no confunde el enemigo. Frente a las teorías burguesas que reducen el problema de la desigualdad a una cuestión de género, exonerando de responsabilidades a las mujeres burguesas que se benefician de la explotación y la opresión de la inmensa mayoría de mujeres, las compañeras mexicanas tienen claro que la desigualdad de la mujer es resultado de la sociedad basada en la explotación y dividida en clases sociales, es decir, el capitalismo.
Así , la OMTM llama a organizarse y a luchar no a las mujeres en general, sino a las mujeres trabajadoras que día a día acuden a sus centros de trabajo donde cobran menor salario por igual trabajo o menos prestaciones; a las que difícilmente contratan teniendo hijos menores por temor a que rindan menos beneficios por necesidad de cuidarlos; a las víctimas de acoso laboral y sexual; a las que cuando salen hacia sus casas son quienes sufren los asaltos, secuestros, violaciones y asesinatos.
La OMTM plantea que la libertad de las obligaciones del hogar, de estudiar, de trabajar donde lo decida, la obtendrá la mujer sólo con la emancipación de sus opresores: el hombre y la mujer burguesa que viven a costa de la riqueza que se produce en las fábricas, en los servicios y con la explotación del cuerpo en los mercados del sexo. Plantea para la mujer trabajadora la tarea urgente de transformar la realidad y generar espacios dignos de trabajo y de vida a través de la participación sindical, de la construcción de comités de vigilancia al interior de los centros de trabajo, con brigadas de seguridad en los barrios para combatir la violencia, recursos jurídicos ante las violaciones del derecho al trabajo por el hecho de ser madres, acceso a la salud, redes solidarias.
Organizaciones internacionales como la Federación de Mujeres de Grecia (OGE) y la Federación de Mujeres Cubanas, organizaciones sindicales, obreras y populares han estado presentes en el Congreso fundacional de la OMTM.
Desde Nuevo Rumbo saludamos la recién nacida organización de masas de las trabajadoras mexicanas que avanzan con paso firme y bajo bandera propia hacia el horizonte de su verdadera emancipación.