Buenas tardes, Ástor y Eva, Secretarios Generales del PCTE y de los CJC, respectivamente. Desde Nuevo Rumbo es un placer contar con vosotros para esta entrevista de nuestro número de mayo. Se acercan unas elecciones municipales y autonómicas que son, además, la antesala de las elecciones generales que se celebrarán a finales de año. El PCTE se presenta en un buen número de comunidades autónomas y municipios, y queríamos contar con vuestros análisis para saber cómo afrontan el PCTE y los CJC estas elecciones.
Nuevo Rumbo: En primer lugar, Ástor, echando la vista atrás, vemos que la sigla del PCTE ha cumplido hace poco cuatro años de vida. Si a día de hoy alguien no conoce al Partido y ve que se presenta a las elecciones en la comunidad autónoma o la localidad donde reside, ¿qué le dirías de primeras? ¿Qué es el PCTE y cuál es su propuesta, y por qué sería la papeleta a la que debería votar?
Ástor: Lo primero que hay que decirle a alguien que no conoce al PCTE es que merece la pena conocernos. Que descubrirá que tenemos una propuesta política seria y realista que plantea abordar de raíz los problemas que afectan a la mayoría de la población y que no engañamos a nadie cuando decimos que ninguno de esos problemas se va a resolver si seguimos confiando en que las soluciones vengan de los gestores del capitalismo. En nuestra actividad diaria nos esforzamos por explicar una idea sencilla: que un modelo económico y social basado en la explotación de la mayoría trabajadora nunca va a resolver los problemas de esa mayoría, sino a agravarlos, y quienes gestionan ese sistema desde los gobiernos no pueden resolver realmente esos problemas porque el propio sistema no lo permite. Es necesario poner fin a la explotación, pero para eso primero hace falta que se escuche a esa mayoría trabajadora que la sufre, es necesario que nuestra voz esté presente en el debate político, que no sean otros los que hablen por nosotros ni los que nos marquen la agenda de lo que es importante o no en cada momento. Por eso hay que apoyar al PCTE allí donde haya una candidatura nuestra, porque es la manera de que se tenga en cuenta a los trabajadores y trabajadoras de este país.
Nuevo Rumbo: ¿Cómo afronta el Partido una cita electoral como la del 28 de mayo, cuál es el objetivo que se marca?
Ástor: Nuestro objetivo es doble. Queremos que cada vez más personas nos conozcan como organización y conozcan nuestra propuesta política, nuestras ideas y nuestros objetivos. Y al mismo tiempo queremos que esas personas se impliquen en la política a través del PCTE, que hagan que nuestra lucha sea cada vez más efectiva y llegue a más sectores, que cale profundamente la idea de que las cosas no pueden seguir como hasta ahora y de que hace falta otra forma de desarrollo económico, político y social, radicalmente diferente a la que nos enseñan los partidos parlamentarios, que anteponga los intereses de esa mayoría de trabajadores y trabajadoras que generan la riqueza con su trabajo a cualquier otra cosa. Hasta ahora no ha sido así, y así nos va…
Eva: Eso es. Como decía Ástor, entendemos que las y los trabajadores tienen que hablar con voz propia e independiente, y con ese fin los comunistas necesitamos de todo altavoz para situar las que creemos que son las mejores herramientas para que eso se haga realidad, hasta sus últimas consecuencias. Por eso es importante que nuestra propuesta esté presente en las elecciones. Y por eso, también, situar al partido comunista como alternativa al capitalismo y a sus propios partidos significa que el voto comunista es sobre todo una declaración de voluntad. Voluntad de combate y militancia, de no delegar y, efectivamente, tomar el presente en nuestras manos.
Nuevo Rumbo: Eva, en unas elecciones como estas, en las que el Partido trata de ganar referencialidad entre la clase obrera y que su discurso y actividad lleguen a sectores cada vez más amplios, ¿cuál es el papel de los CJC?
Eva: Bueno, el papel de los CJC como organización juvenil precisamente es llevar estas ideas y hacerlas realidad allí donde están los y las jóvenes. Los CJC, además de militantes comunistas, somos jóvenes obreros que estudiamos, trabajamos y vivimos donde estudia, trabaja y vive la juventud obrera. Sentimos también igual porque nuestros problemas son los mismos. Nuestro papel, por tanto, es transformar la resignación, la apatía, la rabia y la frustración –que comprendemos bien– en acción revolucionaria. Como decía antes, entendemos que el trabajo electoral debe ser una parte más de este papel que los CJC tenemos como organización juvenil comunista.
Nuevo Rumbo: ¿En cuántas comunidades autónomas y municipios se presentará el PCTE? ¿Qué valoración hacéis al respecto, supone en términos generales un avance frente a 2019?
Ástor: De las CCAA en las que hay elecciones autonómicas vamos a estar en cuatro: Asturias, Cantabria, Madrid y Aragón, y en las municipales estaremos en municipios de Galicia, Asturias, Cantabria, Euskadi, Castilla y León, Madrid, Aragón, Baleares, Cataluña y Andalucía. La lista es larga y en estos momentos todavía estamos pendientes de cerrar algunas candidaturas. Nos gustaría estar presentes en más lugares pero nos movemos en unas cifras que permiten dar visibilidad al PCTE, que no deja de ser una sigla bastante reciente en el panorama político español; por lo tanto, estamos contentos.
Nuevo Rumbo: Pongamos ahora un caso distinto al que comentábamos al principio: imaginemos una persona que sí conoce al Partido, que sigue su actividad y comparte buena parte de su discurso. Pero en estas elecciones, entre el temor a gobiernos “de derechas” y la esperanza de que Unidas Podemos u otros partidos a la izquierda del PSOE consigan “arrancar” ciertas mejoras, siente que votar al PCTE es “tirar su voto”, porque es consciente de que no obtendrá representación. ¿Qué le diríais a esa persona para tratar de cambiar su percepción?
Eva: Que siempre va a haber un mal mayor que justifique el discurso del mal menor. Creo, no obstante, que para romper esa lógica es importante comprender a aquellos que no nos votan porque “votan útil”. Las generaciones más jóvenes no conocen otro presente que el de la crisis, hace pocos años que una pandemia nos encerró en casa y la guerra en Europa es una realidad. Así es muy fácil para los partidos de la izquierda parlamentaria articular un discurso de “contención” frente a la barbarie del gobierno de la derecha. Porque esa “barbarie” es una amenaza constante. Pero es que ahí está el quid de la cuestión: barbarie también han sido los cuatro últimos años de gobierno socialdemócrata porque barbarie es nuestro presente, y cada vez va a serlo más. Esa es la razón por la que votar comunista no es tirar el voto.
Ástor: El único voto útil es el voto que significa que la mayoría trabajadora será más fuerte el día después de las elecciones. Permitidme que ponga en duda que votar directa o indirectamente al PSOE sea “útil”. Nosotros nos esforzamos por romper esa lógica porque es perversa y mantiene atrapados a los trabajadores en el dilema del mal menor, que al final nunca se resuelve para bien. Como decía antes, la clave no es pensar en quién gobernará el 29 de mayo, sino cómo te vas a organizar para luchar contra las políticas antiobreras que van a desarrollar unos y otros cuando estén en el gobierno. A mí me parece que esto es lo esencial a la hora de definir qué voto es útil y qué voto no lo es.
Nuevo Rumbo: Hoy, y desde hace unos años, el tablero político parece dividido en dos bloques enfrentados, una suerte de bipartidismo ampliado. En las elecciones de 2019, la socialdemocracia agitó la bandera del antifascismo, hablando de “frentes antifascistas” o cordones sanitarios con los que, supuestamente, hacerle frente a la extrema derecha. ¿A la reacción se la combate principalmente en las urnas?
Ástor: Ese discurso de la socialdemocracia lleva siendo así desde hace muchos años, cambiando los términos pero diciendo básicamente lo mismo: que sólo ellos defienden a las clases populares. La realidad es que con la socialdemocracia hemos tenido reconversión industrial, destrozo de sectores económicos enteros, deslocalizaciones, reformas laborales, privatizaciones… igual que con la derecha más o menos extrema.
Que ahora PP y PSOE tengan una muleta cada uno no cambia mucho las cosas en realidad, porque se ve de manera clara que su debate es entre distintas formas de gestión del capitalismo, nada más. No son capaces de plantear nada más que gestionar lo que hay, unos y otros.
Eva: Cuando hablamos del combate a la reacción es fundamental salirnos del corto plazo de la política burguesa. Votar al PSOE y amigos para frenar a la reacción, además de desarmarnos, no cambia ni puede ni aspira a cambiar las condiciones que hacen que la reacción crezca. Esto es una cuestión de correlación de fuerzas, pero bien entendida. Porque desde los partidos burgueses localizan esa correlación en el parlamento, en el reparto de escaños, en lugar de en el nivel de organización y conciencia de las clases sociales. Dicho rápidamente: la única manera de frenar a la reacción es una clase obrera organizada en sus barrios y pueblos, en sus centros de estudio y de trabajo; un fuerte movimiento de masas con el Partido Comunista a la cabeza.
Nuevo Rumbo: Eva, en un contexto en el que la vida de la juventud está muy marcada por la precariedad, la incertidumbre, los problemas de salud mental, y por tanto es habitual y entendible que sientan cierta apatía o resignación ante el panorama político, ¿qué mensaje les enviarías a esos jóvenes que estén hastiados? ¿La papeleta del PCTE también los apela a ellos y ellas?
Eva: Lo decía antes, por supuesto. Es que si hablamos de que no podemos pagar el alquiler, si hablamos de que nuestra pauta de vida es un agotador circuito entre el paro, el trabajo temporal (lo llamen como lo llamen) y las condiciones de inhabitabilidad de nuestras casas, la falta de expectativas y el consumo generalizado de ansiolíticos y antidepresivos para tirar adelante, hay un denominador común, que es el capitalismo contemporáneo y la pauta de vida a la que nos somete. La resignación generalizada entre los jóvenes tiene que ver con la comprobación inmediata de que no hay mucho margen, ya, para gestionar eso. Y habría que añadir: efectivamente, no hay mucho margen dentro del capitalismo y sin organización masiva, independiente y revolucionaria de la clase. Por eso es importante el compromiso militante con la revolución, y el voto es un primer momento para ello.
Nuevo Rumbo: Estas elecciones autonómicas y municipales pueden influir en buena medida en lo que ocurra en las elecciones generales que se celebrarán a finales de año. ¿Cómo afronta el PCTE este largo ciclo electoral? ¿Y cómo enmarca ambos procesos dentro de todo su trabajo general?
Ástor: El ciclo electoral es interesante porque lo que pase el 28M, como dices, va a influir mucho en las generales. Por eso Sánchez está esforzándose tanto en sacar pecho estas semanas, en temas de vivienda, en lo de que se va a ver con Biden, en que va a tener la presidencia de turno de la UE, etc. Para nosotros, este largo ciclo electoral, que incluso continuará en las europeas de 2024, es una forma de darnos a conocer a sectores más amplios, como decía antes, y para avanzar en ese planteamiento de que los intereses de la mayoría trabajadora entren en escena de verdad. En ese sentido, lo electoral es una parte más del trabajo general nuestro, es una campaña política muy concentrada, cuyos plazos no marcamos nosotros y donde sabemos que se oye más a quien pone más euros encima de la mesa, pero donde tenemos la oportunidad de contactar con sectores más amplios que en otros momentos. Sin duda, que eso se traduzca en un apoyo electoral mayor es positivo, pero eso lo tenemos que valorar al final del ciclo, creo yo, cuando veamos lo que hemos crecido en votos pero, sobre todo, en presencia y militancia.
Muchas gracias a los dos por la entrevista, ha sido un placer. Estamos seguros de que quien lea estas líneas tendrá claro qué propuesta política les plantea el PCTE a las y los trabajadores de nuestro país. Y confiamos en que el próximo 28 de mayo muchos se verán animados no sólo a elegir la papeleta comunista, por estar de acuerdo con el programa y el discurso del PCTE, sino, lo que es más importante, a vincularse de una forma más directa y activa con el Partido, incluso ingresando en sus filas, para reforzar la alternativa revolucionaria que vaya socavando día a día los cimientos de un capitalismo que nos lleva camino del precipicio. ¡Suerte el 28M y al día siguiente!